Paraguay, a través de la Ley de Responsabilidad Fiscal vigente desde 2013, ha implementado un marco para garantizar la sostenibilidad de sus finanzas públicas, según informó el Ministerio de Economía.
Esta normativa establece que el déficit máximo permitido es del 1,5% del PIB.
El déficit fiscal en Paraguay comenzó a incrementarse en 2012 debido a un aumento salarial del 38%.
Posteriormente, en 2019, la sequía afectó la economía, lo que llevó al Congreso a aprobar un déficit del 2,8% del PIB.
La situación se agravó en 2020 con la llegada de la pandemia, resultando en un déficit del 6,1% del PIB bajo la Ley de Emergencia.
En respuesta a estos desafíos, el Estado paraguayo ha firmado un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Este convenio tiene como objetivo restablecer el déficit al 1,5% para el año 2026.
Para lograrlo, se implementarán estrategias que incluyen el incremento de ingresos y el recorte de gastos.
Las medidas para reducir el déficit se enfocarán en recortar gastos no rígidos, con especial atención a proyectos de infraestructura.