Según el Ministerio de Agricultura, Brasil avanza en sus planes para monitorear la producción ganadera.
Esta información fue revelada durante el evento Bloomberg New Economy at B20 en São Paulo.
El Gobierno está colaborando con el sector privado para desarrollar una plataforma informativa que permitirá a los empacadores de carne rastrear completamente sus suministros a partir de 2027.
Se espera que la carne de vacuno brasileña sea completamente rastreable para el año 2032.
La producción de carne de vacuno en Brasil ha sido frecuentemente asociada con la degradación de la Amazonía.
Este nuevo sistema se presenta como una medida clave para responder a las crecientes demandas internacionales de sostenibilidad ambiental.
Empresas líderes en el sector cárnico, como JBS SA, Marfrig SA y Minerva SA, han declarado progresos en el control de proveedores directos.
La implementación de un programa respaldado por el gobierno también facilitará un rastreo más exhaustivo de los proveedores indirectos.
La Unión Europea ha propuesto un retraso de 12 meses en la implementación de nuevas normativas que exigen a los vendedores de materias primas demostrar que sus productos no provienen de zonas deforestadas.
Este aplazamiento brindaría a Brasil y otros países tiempo adicional para adaptarse a las nuevas regulaciones.
Brasil está fortaleciendo sus vínculos con países de Asia, África y Oriente Próximo, regiones que no imponen los mismos requisitos ambientales que Europa.
Esta estrategia busca diversificar los mercados y asegurar la estabilidad económica del sector alimentario brasileño frente a posibles restricciones comerciales.