La confianza de los consumidores estadounidenses descendió inesperadamente a principios de julio, alcanzando su nivel más bajo en los últimos ocho meses, según un informe preliminar de la Universidad de Michigan.
El índice de sentimiento cayó a 66 en julio desde 68,2 en junio. Una encuesta de Bloomberg entre economistas había previsto un ligero aumento hasta 68,5.
Las expectativas de los consumidores sobre la inflación para el próximo año cayeron por segundo mes consecutivo, situándose en 2,9%, según los datos del viernes.
Los consumidores también anticipan que los costos aumentarán a un ritmo anual del 2,9% durante los próximos 5 a 10 años, una baja respecto al mes anterior.
El indicador de las condiciones actuales se redujo a 64,1 desde 65,9, alcanzando su nivel más bajo desde diciembre de 2022.
Asimismo, una medida de las expectativas descendió a 67,2, un mínimo de ocho meses, desde los 69,6 registrados en junio.
Los datos recientes mostraron que la inflación general se enfrió en junio, con una medida de las tendencias de los precios subyacentes registrando su menor avance desde 2021.
Esto ha reforzado las especulaciones sobre una posible reducción de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal en los próximos meses.
El mercado laboral, que ha sido un motor del gasto de los consumidores, mostró signos de enfriamiento, con el desempleo subiendo al 4,1% en junio, su nivel más alto desde finales de 2021.
Las condiciones de compra de bienes duraderos cayeron a 85, el nivel más bajo en poco más de un año.
Las expectativas de los consumidores sobre la economía pueden estar influenciadas por la proximidad de las elecciones presidenciales de noviembre.
Aunque no hay muchas evidencias de que el primer debate presidencial haya alterado significativamente sus opiniones económicas, los consumidores perciben una incertidumbre considerable en la trayectoria económica futura.