El Banco Central de Chile ha decidido recortar su tasa de política monetaria en medio punto, situándola en el 6%. Desde julio, el banco ha reducido la tasa en un total de 5,25 puntos porcentuales.
La entidad ha desacelerado su ciclo de relajación monetaria, considerando el reciente aumento en los precios de las materias primas y los anuncios de la Reserva Federal sobre el mantenimiento de tasas altas por más tiempo.
A pesar de ello, el banco central chileno aún cuenta con margen para continuar con los recortes, ya que las expectativas inflacionarias permanecen ancladas en el objetivo del 3%, y el peso chileno se ha fortalecido un 5% en el último mes.
El Banco Central prevé que, de acuerdo con el escenario central del IPoM de marzo, la tasa de política monetaria continuará reduciéndose. La magnitud y el ritmo de este proceso dependerán de la evolución del escenario macroeconómico y sus implicancias para la inflación.
El indicador de actividad económica mostró una caída del 0,7% mensual en marzo, aunque el PIB de Chile se expandió un 1,9% en el primer trimestre del año. A principios de mayo, el gobierno ajustó al alza su previsión de crecimiento económico para 2024, situándola en el 2,7%.