Según publicaciones de Harvard, un reciente estudio del Centro Médico Beth Israel Deaconess ha demostrado la efectividad de una nueva técnica de biopsia de piel. Esta técnica se emplea para detectar una forma anormal de la proteína alfa-sinucleína, que es un indicador clave de la enfermedad de Parkinson y otras sinucleinopatías.
La investigación, que fue financiada por los Institutos Nacionales de Salud y publicada en el Journal of the American Medical Association, establece que la biopsia de piel es un método mínimamente invasivo y altamente preciso para identificar la patología subyacente en pacientes sospechosos de sufrir sinucleinopatías.
Durante el estudio, que involucró a 428 individuos, se encontró que más del 90% de los pacientes con diagnósticos clínicos confirmados de enfermedades específicas mostraron resultados positivos para la proteína anormal en la piel.
Los resultados sugieren que este método podría facilitar diagnósticos más rápidos y precisos para trastornos como la enfermedad de Parkinson, la demencia con cuerpos de Lewy, la atrofia multisistémica y la insuficiencia autonómica pura. La presencia de alfa-sinucleína fosforilada (P-SYN) en las fibras nerviosas de la piel ha resultado ser un biomarcador confiable para estas condiciones.
Este avance podría acelerar el desarrollo de nuevos tratamientos al mejorar la identificación de pacientes aptos para ensayos clínicos. La precisión de la prueba también ofrece esperanzas para mejoras en la gestión personalizada de la enfermedad, lo que es crucial dado que estas condiciones varían significativamente en síntomas y progresión.