Estados Unidos está estableciendo las bases para aplicar nuevas sanciones contra funcionarios del gobierno venezolano, en respuesta a las recientes elecciones presidenciales de julio, cuya legitimidad ha sido ampliamente cuestionada.
Según documentos obtenidos por Bloomberg, las sanciones podrían anunciarse en los próximos días y se centrarían en líderes clave que, según Estados Unidos, obstruyeron la celebración de elecciones libres y justas.
Las medidas, que serían anunciadas por el Departamento del Tesoro de EE.UU., incluirían sanciones contra 15 funcionarios vinculados al gobierno de Venezuela.
Estos funcionarios, según la información, habrían jugado un papel crucial en la manipulación del proceso electoral. Entre los sancionados se incluirían miembros de la autoridad electoral, del máximo tribunal del país, de la Asamblea Nacional y de cuerpos de inteligencia.
La nueva ronda de sanciones se produce un mes después de que las autoridades venezolanas declararan la reelección de Nicolás Maduro para un tercer mandato consecutivo.
Sin embargo, Estados Unidos y otros países han puesto en duda la legitimidad de los resultados, y algunos aliados de Maduro han solicitado la publicación de las tabulaciones de los votos.
En este contexto, las sanciones buscan ejercer presión sobre aquellos que colaboraron con Maduro para socavar el proceso electoral.