La Unión de Gremios de la Producción (UGP) analizó la evolución del precio internacional de la soja y su impacto en el sector agrícola.
Según la entidad, el precio del grano ha experimentado una caída significativa, pasando de casi 500 dólares por tonelada en 2023 a valores que rondan los 330 y 340 dólares por tonelada en las últimas semanas.
Este comportamiento del mercado se presenta en un contexto de condiciones climáticas adversas, lo que genera incertidumbre en los productores.
Uno de los elementos que influye en la cotización del grano es la oferta global, que se mantiene elevada.
Las proyecciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) indican que la producción estadounidense superaría los 113,27 millones de toneladas, mientras que en Brasil las estimaciones fueron ajustadas al alza hasta alcanzar los 166,33 millones de toneladas.
Este panorama genera presión sobre el sector productivo, que ha enfrentado desafíos debido a la falta de lluvias generalizadas durante la campaña agrícola.
La expectativa se centra en encontrar un punto de equilibrio entre los costos de producción y los rendimientos obtenidos.
El proceso de cosecha de la soja ha avanzado en más del 60%, pero los resultados son dispares. Dentro de una misma parcela se observan diferencias en los rendimientos, lo que dificulta la consolidación de un promedio general.
Las variaciones están relacionadas con factores como la época de siembra y las condiciones climáticas registradas en los últimos meses.