Un cambio impositivo sorpresivo en Brasil, el mayor exportador mundial de soja, ha llevado a los compradores chinos a adquirir suministros de Estados Unidos.
Desde el anuncio del cambio fiscal el pasado martes, los importadores de China han comprado al menos 208.000 toneladas de soja estadounidense, según datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
Estas compras reflejan la dificultad que enfrentará el gobierno de Brasil para aprobar la medida provisional que afecta la capacidad de los exportadores y procesadores de materias primas para monetizar ciertos créditos fiscales.
El ministro de Hacienda ya está considerando retirar la decisión tras la oposición de empresas y del Congreso.
Un gestor de riesgos para América Latina indicó que "China está comprando suministros estadounidenses porque los compradores de Brasil no pueden repercutir esos costes más elevados al agricultor".
Este ajuste ha llevado a que las ofertas en Brasil sean más reducidas, lo que encarece los productos.
Un grupo del sector que representa a los principales comerciantes de cultivos había advertido que la medida reduciría significativamente los beneficios de los procesadores de soja.
Algunos comerciantes también han retirado nuevas ofertas de materias primas como la soja y el maíz del mercado.
Estados Unidos también vendió 152.000 toneladas de maíz a destinos no especificados en el mismo periodo, un movimiento que algunos comerciantes también atribuyen al cambio impositivo en Brasil.
Bloomberg