Un estudio reciente arroja luz sobre la ingesta de sodio en personas con condiciones cardíacas, revelando que consumen más del doble de la cantidad diaria de sodio recomendada. Esta información será presentada en la próxima reunión anual del Colegio Estadounidense de Cardiología, destacando un área crítica de atención para la salud cardiovascular.
A pesar de las claras directrices que sugieren la importancia de minimizar el sodio para mejorar los resultados en salud cardíaca, se encontró que la mayoría de los pacientes cardiacos luchan por limitar su consumo de sal. En promedio, estos pacientes ingieren 3,096 mg al día, superando ampliamente tanto la recomendación de 1,500 mg al día para aquellos con afecciones cardíacas como el límite de 2,300 mg al día recomendado para individuos sanos.
El exceso de sodio en la dieta puede llevar a un aumento en la presión arterial, lo que resulta en un mayor esfuerzo para el corazón y un riesgo elevado de daño a los vasos sanguíneos. Además, puede provocar retención de líquidos, complicando condiciones como la insuficiencia cardíaca. Este estudio subraya la necesidad crítica de estrategias efectivas para ayudar a los pacientes cardiacos a ajustar su ingesta de sodio a niveles seguros.