Según datos oficiales del BCP, el Producto Interno Bruto (PIB) experimentó un aumento interanual del 4,8% en el segundo trimestre de 2024.
Este desempeño llevó a que, al finalizar el primer semestre del año, se acumulara un crecimiento del 4,6%.
Desde el enfoque de la oferta, el crecimiento interanual fue impulsado por los resultados positivos en los sectores de servicios, manufactura, construcción y ganadería.
La agricultura también aportó al crecimiento, aunque en menor proporción.
Sin embargo, el descenso en la generación de energía eléctrica atenuó el desempeño general de la actividad económica.
En términos de demanda, los elementos que influyeron positivamente fueron el consumo privado, la formación bruta de capital fijo y el consumo del gobierno.