El ministro de Agricultura y Ganadería, Carlos Giménez, anunció que se reunirá con los directivos de la Cámara Paraguaya de Supermercados (Capasu) para discutir los precios del tomate que llegan a los consumidores finales.
El objetivo es encontrar un precio equilibrado entre lo que se paga al productor en su finca y el costo final de venta en los supermercados.
Durante una entrevista en Radio Nacional del Paraguay, Giménez explicó que la producción nacional de tomate es actualmente abundante.
En este contexto, mencionó que la importación del producto podría ser intervenida para equilibrar el mercado. El ministro destacó la "muy buena producción" local y la necesidad de intervenir para manejar la oferta.
El ministro enfatizó la importancia de las ferias de productores, donde los consumidores pueden acceder directamente a los productos a precios más asequibles.
Estas ferias se organizarán tanto en la capital como en sus alrededores, facilitando así el acceso directo de los consumidores a los productos frescos.
Giménez señaló que, según los productores del Norte, el tomate se vende en las fincas a un precio de G. 7.000 a G. 8.000 por kilo.
En las ferias de agricultura familiar, el precio del kilo de tomate llega a G. 12.000, mientras que en los supermercados puede alcanzar los G. 20.000 por kilo.
El costo elevado del tomate se debe, en parte, a la importación desde Argentina, donde los precios son altos, así como a los costos de transporte.
Ante esta situación, Giménez indicó que es necesario reducir gradualmente la importación del producto, dado que la producción local es suficiente para satisfacer la demanda.