El crédito a las empresas, que representa 28,2% del PIB, ha mostrado un mayor impulso en los últimos meses, creciendo a tasas superiores a las reportadas en el IEF de noviembre.
A marzo 2024, el crédito a las empresas ha aumentado un 12,3% (sin efecto cambiario), impulsado principalmente por el dinamismo del crédito destinado a la industria, el comercio al por mayor, los servicios y el sector financiero.
Este crecimiento ha sido más notable en las empresas de gran tamaño, seguido por las microempresas, pequeñas y medianas empresas.
En términos de riesgo de crédito, la tasa de morosidad del crédito empresarial total se ha reducido en comparación con el mismo periodo del año anterior.
En marzo 2024, la morosidad total se situó en 1,8%, ligeramente por debajo del 2% observado en marzo 2023. Esta mejora en la calidad de la cartera empresarial está relacionada, en parte, con la disminución de la morosidad en sectores como actividades inmobiliarias, comercio al por menor, industria y agricultura.
La reducción de la morosidad en el sector agrícola se puede atribuir, en parte, a la aplicación de medidas transitorias que permitieron la renegociación de deudas, con vigencia hasta fines de septiembre 2024.
Dado que la actividad económica ha mostrado una dinámica positiva en los últimos meses y se mantienen proyecciones favorables para todo el 2024, se prevé una evolución positiva del crédito otorgado a empresas y un riesgo de crédito en niveles bajos.