La Corte Suprema de Brasil negó la solicitud del expresidente Jair Bolsonaro para viajar a Washington y participar en la investidura de Donald Trump.
La decisión se tomó tras considerar que no existen pruebas suficientes de una invitación formal al evento.
El juez Alexandre de Moraes, siguiendo las recomendaciones de la fiscalía general, determinó que no había fundamentos para autorizar la salida de Bolsonaro del país.
Según el expediente judicial, la defensa del expresidente presentó un correo electrónico dirigido a su hijo, Eduardo Bolsonaro, como prueba de invitación, pero este documento no contenía detalles específicos del evento.
El pasaporte de Bolsonaro fue confiscado por la policía federal en febrero de 2024 como parte de una investigación sobre un presunto intento de golpe de Estado ocurrido tras las elecciones de 2022.
La fiscalía señaló que el viaje propuesto no representaba un interés vital que pudiera justificar una excepción a las restricciones legales.
Bolsonaro enfrenta varios procesos judiciales relacionados con su mandato.
Entre estos, se encuentra la acusación de planear un golpe de Estado junto con otros altos funcionarios, además de investigaciones sobre presuntas irregularidades, como la venta ilegal de regalos diplomáticos y el uso de registros de vacunación falsificados.
La policía federal ha recomendado imputaciones penales contra Bolsonaro y 37 personas más, incluidos altos mandos del ejército.
El fiscal general podría presentar cargos formales antes de fin de año, basándose en el resultado de estas investigaciones.