Según datos de la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro), la molienda de oleaginosas registró en 2024 una caída del 12%, con un total procesado de 2.648.267 toneladas, lo que representa 284.918 toneladas menos que en el año anterior.
En diciembre, el procesamiento alcanzó 6.212 toneladas, siendo el nivel más bajo de la última década.
El procesamiento industrial de soja representó en 2024 solo el 24% de todo el valor generado por el complejo sojero, el registro más bajo en diez años.
Los ingresos obtenidos por la comercialización de productos derivados de la soja sumaron 1.007,3 millones de dólares, lo que significó una reducción de 400 millones de dólares con relación al año anterior.
En los últimos cuatro años, la industria aceitera ha operado con un nivel de ociosidad superior al 33%, lo que ha reducido la capacidad de agregado de valor en el país.
Desde el gremio indicaron que las condiciones de competitividad han llevado a que una parte importante de la producción sea procesada en el exterior.
El gremio industrial considera que mejorar la competitividad permitiría utilizar plenamente la capacidad instalada y potenciar otros sectores como los biocombustibles y la producción ganadera.
Entre las medidas propuestas se encuentra la devolución del IVA a las exportaciones de productos procesados, así como la implementación de un régimen de admisión temporaria para la compra de materia prima del exterior en períodos específicos.