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PIB de Estados Unidos se expande 2,8% impulsado por consumo y gasto federal
2/11/24
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De acuerdo con datos de la Oficina de Análisis Económico difundidos por agencias internacionales, la economía de Estados Unidos registró un crecimiento sólido en el tercer trimestre.
El Producto Interno Bruto (PIB) ajustado por inflación creció a una tasa anualizada del 2,8%, después de un incremento del 3% en el trimestre anterior.
El gasto del consumidor, que constituye la mayor parte de la actividad económica, aumentó un 3,7%, siendo este el mayor incremento desde principios de 2023.
Este crecimiento fue liderado por un aumento en las compras de bienes duraderos como automóviles, muebles para el hogar y artículos recreativos.
Una medida clave de la inflación subyacente registró un aumento del 2,2%, situándose aproximadamente en línea con el objetivo de la Reserva Federal.
Este indicador refleja la estabilidad de los precios en un contexto donde la entidad ha comenzado a relajar su política monetaria más restrictiva en décadas.
El gasto público experimentó un incremento anualizado del 5%, impulsado por el mayor aumento en la producción federal desde principios de 2021.
El gasto en defensa nacional creció a una tasa del 14,9%, la más alta desde 2003. Por su parte, el gasto gubernamental federal, excluyendo defensa, aumentó al ritmo más acelerado en un año.
El crecimiento del PIB fue atenuado por la volatilidad en las cifras comerciales.
Las exportaciones netas restaron 0,56 puntos porcentuales al total, mientras que las existencias disminuyeron en 0,17 puntos porcentuales.
Hacia el final del trimestre, los minoristas incrementaron las importaciones de bienes de consumo ante el temor de una posible huelga de estibadores que afectara la cadena de suministro.
Una medida preferida por los economistas, que combina el gasto del consumidor y la inversión empresarial—conocida como ventas finales a compradores domésticos privados—subió un 3,2%, alcanzando el nivel más alto en lo que va del año.
A pesar del crecimiento general, los ingresos personales ajustados por inflación después de impuestos aumentaron un 1,6% anualizado, representando el menor avance en un año.
Esto indica que el crecimiento económico no se ha distribuido de manera uniforme en los últimos años.
