Según estadísticas del INE el país ha experimentado una notable disminución en sus tasas de pobreza, pasando del 25,5% al 22,7% entre 2022 y 2023. En paralelo, la pobreza extrema también ha visto una reducción, del 6,1% al 4,9%, lo que representa un cambio significativo para los más afectados por condiciones de vida adversas.
Es notable que la mayor parte de esta mejora se haya concentrado en las zonas rurales, donde reside una proporción considerable de la población más vulnerable del país. Según datos, 157 mil personas han logrado superar la barrera de la pobreza, de las cuales 104 mil pertenecen al sector rural.
El crecimiento económico sostenido, junto con la creación de empleo y el control efectivo de la inflación, se identifican como pilares fundamentales detrás de este avance. Específicamente, el aumento del 8,6% en el ingreso de las personas, por encima de la inflación del 3,7% en 2023, destaca como un indicador clave del fortalecimiento del poder adquisitivo y, por ende, de la mejora en las condiciones de vida de la población.
El ajuste del 25% en las transferencias monetarias al programa Tekopora es destacado por su rol esencial en prevenir el incremento de la pobreza y pobreza extrema. Esta medida, en particular, ha sido vital para evitar que más de 156 mil personas cayeran en la pobreza y más de 110 mil en la pobreza extrema.