El Ministerio Público de Bolivia emitió una orden de aprehensión contra el expresidente Evo Morales, acusado del delito de trata de personas agravado, informó la fiscal departamental de Tarija en una conferencia de prensa este 16 de diciembre.
La decisión se tomó debido a la no comparecencia de Morales a una citación previa realizada por la Fiscalía.
La fiscal explicó que la orden también incluye a otra persona vinculada al caso, Idelsa Pozo Saavedra, quien tampoco asistió a la citación.
La autoridad argumentó que, ante la falta de un justificativo válido, corresponde legalmente la emisión de un mandamiento de aprehensión.
El caso involucra a Morales en una denuncia presentada por hechos ocurridos en 2019, cuando aún ejercía como presidente de Bolivia.
Además, los padres de la presunta víctima también fueron responsabilizados por la Fiscalía; uno de ellos sí asistió a la citación convocada por el Ministerio Público.
La orden de captura fue emitida hace varias semanas, pero no ha podido ser ejecutada hasta ahora. La fiscal departamental informó que se desconoce el domicilio actual de Morales y que bloqueos registrados en Cochabamba y otras regiones dificultaron la labor de la Policía para dar con su paradero.
Dichos bloqueos, realizados por sectores afines al expresidente, se extendieron durante 24 días entre octubre y noviembre, con un impacto económico estimado en 2.200 millones de dólares.
En declaraciones del 6 de diciembre, Morales afirmó que el gobierno de Bolivia estaría ejecutando un plan para detenerlo, con la supuesta intención de enviarlo a Estados Unidos o Argentina.
Señaló que recibió alertas de personas relacionadas con el Ministerio de Gobierno que advertían sobre acciones para evitar su candidatura a las elecciones presidenciales de 2025.