De acuerdo con información publicada por The Washington Post, el gobierno de Estados Unidos inició una acción legal para anular acuerdos vigentes de negociación colectiva entre agencias federales y el principal sindicato que representa a empleados públicos.
La presentación judicial se realizó tras la firma de una orden ejecutiva que instruye a las agencias a cesar este tipo de negociaciones.
La medida fue promovida por el Departamento de Justicia y cuenta con el respaldo del Departamento de Defensa, así como de otras instituciones gubernamentales.
Según los fundamentos presentados en la demanda, los acuerdos sindicales en cuestión habrían sido firmados antes del inicio de la actual administración, y los demandantes afirman que obstaculizan los intentos de reforma institucional.
También se sostiene que las condiciones establecidas en dichos convenios limitan la capacidad de supervisión y afectan la operatividad interna de las agencias.
Entre los organismos que acompañan la acción legal figuran el Departamento de Seguridad Nacional, el Departamento de Agricultura, la Agencia de Protección Medioambiental y la Administración de la Seguridad Social.
El documento emitido por el Ejecutivo indica que la seguridad nacional y el interés público podrían verse comprometidos si persisten estas limitaciones a la gestión interna, incluyendo la imposibilidad de realizar cambios estructurales sin negociaciones adicionales con los sindicatos.
La directiva también incluye la prohibición de entablar nuevas negociaciones colectivas en organismos que no forman parte directamente del área de defensa.
Entre ellos se encuentran la Fundación Nacional para la Ciencia y departamentos que regulan áreas como energía o protección medioambiental.
Una hoja informativa distribuida por la Casa Blanca sostiene que estos organismos tienen vínculos con sectores estratégicos como la ciberseguridad o la investigación aplicada a desarrollos militares.