Dieciocho países de América Latina y el Caribe, junto con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), formaron una alianza para enfrentar el crimen organizado en la región.
Durante el lanzamiento, que tuvo lugar en Barbados el 12 de diciembre, los países firmaron una declaración que establece acciones clave para combatir esta problemática.
El objetivo principal es fortalecer instituciones, reducir los flujos financieros ilícitos y proteger a las comunidades más vulnerables, especialmente aquellas expuestas al reclutamiento de jóvenes.
Las acciones incluyen también el desarrollo de medidas para debilitar los mercados ilícitos y aumentar la capacidad operativa de los gobiernos para enfrentar al crimen organizado.
Entre las estrategias definidas, se encuentran la protección de poblaciones en alto riesgo, el fortalecimiento de sistemas de seguridad y justicia, y la mejora de la tecnología para optimizar las respuestas frente a los grupos criminales.
Estas acciones se ejecutarán a través de un comité directivo y tres grupos técnicos con presencia en veinte países.
Además de los gobiernos involucrados, la alianza cuenta con el apoyo de organismos internacionales como la Organización de los Estados Americanos (OEA), INTERPOL, el Banco Mundial, CAF, y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), entre otros.
Ecuador asumirá la primera presidencia pro tempore de la alianza, mientras que el BID actuará como Secretaría Técnica.
Este último proporcionará apoyo estratégico y coordinará la movilización de recursos para implementar las medidas acordadas.